Hotel Rural & SPA Mas Prat de Castellar - Castellar de la Muntanya, Girona

Oriol L.

Romantico y salvaje lo define bien. Fantástico, exquisita la comida, las vistas, todo 🙂
Hemos estado un día con mi pareja, que maravilla de lugar.
El trato es excelente, los propietarios majísimos y muy atentos. Los postres caseros son una locura pero el rey es el cheesecake!
Sinceramente como en casa y de cuento.
Sin duda volveremos a desconectar pronto.

Elisabeth T.

Hemos pasado el finde y la verdad que no se que nos a gustado más de la estancia, los dueños son encantadores y super atentos, el sitio es espectacular para desconectar y coger pilas la verdad que es idóneo, la parte del Spa es un gran puntazo la sala del jacuzzi de piedra natural, y no con menos puntuación...lo mejor de lo mejor es la comida, BRUTAL !!!! Embutido de la zona, txuketon, ... y sus grande postres. Volveremos seguro ya que era nuestra última escapada siendo, y volveremos siendo 3. Gracias familia por hacer la estancia tan confortable.

Irene M.

Este hotel rural se encuentra en un entorno muy bonito, eso sí a tener en cuenta que el camino de llegada es complejo y se hace largo, es una pendiente estrecha y difícilmente pasan dos coches.
La atención de los dueños es muy buena y es un lugar agradable, el desayuno es completo y la comida que preparan está rica.

Como punto negativo diría que las habitaciones o al menos la nuestra, nos alojamos en la azul, están un poco deterioradas, había bastante olor a humedad y detectamos que provenía de una de las paredes al lado de la cama, estaba mojada. Faltaba también limpieza en alfombras, decoración etc. además es importante tener en cuenta que la insonorización es nula, se escucha totalmente cualquier ruido y voz en las habitaciones de al lado. Fuera de las habitaciones hay una pequeña sala con sofá, mesa y microondas y si hay gente se escucha absolutamente todo.

Dicho esto, es un lugar acogedor y muy bonito que con alguna mejora podría ofrecer una experiencia de más calidad.

Elodie C.

No suelo poner 5 estrellas a todo, pero en el caso de este hotel se las merecen. El sitio precioso, el personal encantador, la cena riquísima, el desayuno buffet completo y muy bueno, y el SPA una maravilla. Se puede ir con mascota así que fuimos con nuestra gata. Estuvimos en la habitación "Flors" (la violeta), con gran terraza privada con vistas increíbles a las montañas (vimos el amanecer). En la zona común estaba la chimenea encendida, con infusiones y agua de cortesía. Cuidaron todos los detalles, también teníamos agua en la habitación y el SPA. El SPA se privatiza por hora, es genial estar allí solos, también con preciosas vistas. Lo recomiendo 100%. Queremos volver en verano para estar en la magnífica piscina que tienen también. Me encantó todo de ese sitio!!

Mari L. E.

Un lugar maravilloso y con mucha paz. El entorno maravilloso. La comida buenísima y los propietarios encantadores. Tuvimos la habitación marrón con terraza propia. Lo único malo por poner algo es que el baño necesita algunos retoques pero se compensa con todo lo demás
Un detalle precioso.😄fue mi cumple y me sacaron un pastel de postre. Volveremos sin duda.

Carlos N.

Fui a pasar una noche con mi pareja y fue de lo mejor que he visto y visitado.

Nos alojamos en la suit de les flors (lila) y era preciosa, con terraza con vistas espectaculares a la montaña. Tuvimos la oportunidad de disfrutar del SPA de forma privada durante una hora, y todos los detalles estaban muy cuidados, incluyendo también las vistas des del mismo.

Cena buenísima, con productos locales de una excelente calidad y desayuno muy completo.

La atención de Héctor fue de 10. Sin duda volveremos en otra época para también poder disfrutar de la piscina.

Totalmente recomendable

LQ

Excelente lugar, una de las mejor vistas a los valles que he visto nunca. Sin duda un sitio excepcional y privilegiado. La atención y amabilidad de Roser y Héctor es de 10. Desayuno variado, abundante y de calidad. Te quedas enamorado del lugar nada más llegar y te cuesta despedirte. Habitación confortable. Como cosas a mejorar, algún detalle de acabados y mobiliario.

Alejandro C.

Lo bonito de este hotel es el entorno y las vistas. Lástima la dejadez, porque podría ser un 10. Nos hemos alojado en la habitación "Flors", la de color lila.

En cuanto a la limpieza del hotel, la habitación está sucia, tiene telarañas, paredes con manchas y salpicaduras, cortinas sucias (muy sucias), la mesa de la habitación está dañada y sucia (han colocado un tablón de aglomerado de 1 centímetro para hacer de mesa).
Se nota que el propietario no ha entrado en la habitación para ver como vive la experiencia un cliente. Si lo hubiera hecho se daria cuenta que no me puedo vestir en mi habitación porque los de la terraza de al lado me ven. La distribución de los enchufes es nefasta.
Sobre el cuarto de baño... puerta de cristal transparente que no aisla nada. Grifo de lavamos incómodo. Taza del water no se aguanta abierta. Bañera con moho, se cae pintura. Polvo en el radiador. (En el baño también hay un trozo del mismo tablón para estante).
Resumiendo: no cuidan detalles, no hacen mantenimiento, decoración minima y pobre, nada funcional, limpieza pobre.
La terraza de la habitación: cojines de los sillones rotos. Panal de abejas en barandilla. Espacio poco aprovechado. La separación entre terrazas no es opaca, y se ve al vecino ahí tumbado. Además que no hay luz en la terraza (de noche, tuvimos que sacar una lamparita de mesa).
Los colchones y almohadas ofrecen buen descanso.

Sobre las zonas comunes y exteriores: más de lo mismo. Limpieza nula. Zonas sin nivelar (chill outs), llenos de pelusas, pelos de animales, bichos y telarañas. Eso no se ha limpiado en siglos! Mal acceso a las zonas de chill out (no hay peldaños, y los que hay estan en mal estado). Mal mantenimiento. La madera de la terraza principal está en muy mal estado de conservación.
Desayuno buffet muy pobre y baja calidad del producto.
La atención de los dueños es buena.

Toda esta critica constructiva no es por desmejorar el hotel. Hemos pagado 200 euros por noche, y con este precio se espera más. Relación calidad precio demasiado elevado.
Visto el estado general del hotel, por ello decidimos no ir al spa (25 euros), ni pedir un masaje (80 euros), ni apuntarnos a las comidas ni cenas (alrededor de los 30 euros el menú). Porque no iba a ser mejor que todo lo comentado.
Deberían asesorarse de como se lleva la gestión de un hotel. Y ver el ratio de retorno de los clientes que repiten.